Los cables de fibra óptica de planta externa están diseñados para soportar las exigentes condiciones exteriores. Debido a esto, los cables para exteriores tienen una construcción resistente que les permite resistir la luz ultravioleta, los cambios de temperatura y las duras condiciones ambientales. Algunas otras características pueden incluir resistencia a roedores, resistencia a impactos, resistencia al aplastamiento, entre otras, dependiendo de la configuración del cable. Las aplicaciones más comunes de los cables para exteriores son las instalaciones aéreas, autosoportadas, de conductos y enterradas directamente.